1/4 - Las cuatro sedes
Rolex diseña, fabrica, ensambla y prueba todos sus relojes en Suiza exclusivamente.
Rolex diseña, fabrica, ensambla y prueba todos sus relojes en Suiza exclusivamente, gracias al savoir‑faire y al compromiso de sus más de 9000 colaboradores, repartidos en las cuatro sedes de la marca, todas ellas a la vanguardia del progreso tecnológico.
Desde Acacias, la sede mundial en Ginebra, donde se desarrollan y se ensamblan los relojes, hasta Bienne, donde se fabrican los movimientos; desde Plan‑les‑Ouates donde se producen las cajas y brazaletes del reloj, hasta Chêne-Bourg donde se fabrican las esferas, los biseles Cerachrom y los discos de bisel Cerachrom de cerámica y donde se encuentra el savoir‑faire de la marca en gemología y engastado de piedras preciosas, un sofisticado equipo de alta tecnología que es un reflejo de la distinción de Rolex. Una quinta sede está en construcción en Bulle, en el cantón de Friburgo.
Al integrar la totalidad de su producción en cuatro sedes, Rolex ha tomado una decisión estratégica, audaz y visionaria. De este modo, dispone de unas instalaciones de producción sin parangón que aúnan competencias de alto valor añadido con tecnologías de vanguardia. Rolex puede, independientemente, expresar su creatividad y espíritu innovador de acuerdo con sus propios estándares de excelencia. Cada reloj Rolex se crea siguiendo criterios de producción superlativos. Cada elemento se desarrolla, produce y comprueba prestando una atención continua hasta al más mínimo detalle.
La sede mundial de Rolex, localizada en el distrito Acacias de Ginebra, reúne al comité ejecutivo, así como todas las actividades administrativas, comerciales, de comunicación, de patrocinio y filantrópicas, junto a las exportaciones y el servicio posventa mundial. Ampliada en 2022, la sede de Acacias también alberga las actividades de diseño, investigación y desarrollo, que son cruciales para la génesis de los nuevos modelos Rolex.
Además, la sede cuenta con dos imponentes unidades de producción, donde se realiza el ensamblaje final de los componentes de los relojes fabricados en otras sedes. Los relojes acabados también se someten a una serie de pruebas en esta sede antes de recibir la Certificación de Cronómetro Superlativo, que garantiza un rendimiento sin igual en términos de precisión, reserva de marcha, hermeticidad y cuerda automática.
El ciclo que da vida al reloj comienza en Acacias.
Gracias al grado de integración e independencia industrial que ha adquirido, Rolex puede formar equipos altamente autónomos y multidisciplinares y ofrecerles condiciones óptimas de trabajo para diseñar cada faceta de un reloj de pulsera desde el principio de un proyecto.
Esta estructura reúne en un mismo lugar a todos los implicados en la fase de diseño y desarrollo, al tiempo que integra todos los aspectos de la industrialización y tiene en cuenta las reacciones del servicio posventa.
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Plan‑les‑Ouates
La sede Rolex de Plan‑les‑Ouates, localizada en el cantón de Ginebra e inaugurada en 2005, reúne todas las actividades de desarrollo y producción para las cajas y los brazaletes de los relojes, desde las coladas de aleaciones de oro, el aprestado y mecanizado de materiales puros hasta el acabado manual de partes completas.
Se compone de seis alas de 65 metros de largo, 30 metros de ancho y 30 metros de alto, unidas por un pasillo central de circulación. A través de sus actividades y de los considerables recursos allí desplegados, la sede de Plan‑les‑Ouates es emblemática del compromiso de la marca por reunir bajo su propio techo los procesos de calidad y producción de los componentes esenciales de sus relojes.
En Plan‑les‑Ouates, la materia prima se transforma en el exterior físico del futuro reloj.
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Chêne‑Bourg
La planta de Chêne‑Bourg, en las proximidades de Ginebra, concentra todas las actividades relacionadas con el desarrollo y la producción de la esfera, así como las relacionadas con la gemología y el engaste. Los biseles y los discos de bisel Cerachrom de cerámica de alta tecnología también se producen en esta sede.
La esfera del reloj toma forma en Chêne‑Bourg.
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Bienne
La sede de Bienne, a los pies de las montañas del Jura, en el cantón suizo de Berna, se dedica por completo al desarrollo y la fabricación de movimientos Rolex. Aquí, los componentes del movimiento —de 200 a casi 400 para los calibres más complejos— se fabrican meticulosamente, luego se ensamblan a mano y se comprueban rigurosamente. En 2022 se inauguró una nueva ampliación de los edificios de producción.
El corazón del reloj empieza a latir en Bienne.
El «savoir‑faire» relojero de Rolex