Deepsea Challenge

El Deepsea Challenge es la culminación de un largo viaje de experimentación y avances tecnológicos.

Una odisea de varias décadas en el transcurso de las cuales exploradores de las profundidades e ingenieros de Rolex aunaron esfuerzos. Hermético hasta 11 000 metros bajo el nivel del mar, el Deepsea Challenge supera con creces el umbral máximo de resistencia humana a la presión. Para Rolex, se trata de desafiar su propia excelencia técnica, al proponer un reloj fiable y resistente, capaz de participar en las misiones de exploración que se aventuran a los abismos.

James Cameron

1960

Deep Sea Special
«Trieste»

Una inmersión histórica

El 23 de enero de 1960, el Deep Sea Special participó en el récord de inmersión establecido por el oceanógrafo Jacques Piccard y el teniente de la marina estadounidense Don Walsh en la fosa de las Marianas. Fijado en el exterior del batiscafo Trieste, alcanzó una profundidad de 10 916 metros. Más allá del récord —tan vertiginoso que permanecería imbatido más de cincuenta años—, esta misión frente a la costa de la isla de Guam, en el océano Pacífico, abriría una ventana a los abismos. Un mundo submarino que la mayor parte de los investigadores consideraban hasta entonces desprovisto de toda forma de vida. Tras posarse en el fondo, los dos tripulantes escrutaron las tinieblas y descubrieron varias criaturas perceptiblemente vivas. Una vez el batiscafo regresó a la superficie, Jacques Piccard enviaría un telegrama a Rolex: «Tengo el placer de anunciarles que su reloj funciona tan bien a 11 000 metros de profundidad como en la superficie».

Los relojes

2012

Deepsea Challenge de 2012

La hazaña de James Cameron

Hubo que esperar hasta el 26 de marzo de 2012 para que otro explorador, el cineasta James Cameron, se enfrentase —en su caso en solitario— a la fosa de las Marianas, alcanzando una profundidad de 10 908 metros. Había transcurrido más de medio siglo desde el récord histórico de Jacques Piccard y Don Walsh. Nadie hasta entonces había logrado volver a sumergirse en los abismos a tal profundidad. Se desarrolló un nuevo reloj Rolex experimental que se acoplaría al brazo articulado del sumergible de James Cameron: el Rolex Deepsea Challenge. Su fabricación constituyó un doble desafío para la manufactura Rolex: el de la presión abisal, claro está —el reloj se pondría a prueba para afrontar una profundidad teórica de 15 000 metros y una presión de 17 toneladas sobre el cristal—; pero también el del tiempo para su diseño, desarrollo y fabricación. Gracias a su dilatada experiencia en el ámbito de la exploración submarina, Rolex logró fabricarlo en tan solo unas pocas semanas, durante el período de preparación del sumergible DEEPSEA CHALLENGER inventado por James Cameron y su equipo. Como en 1960, el reloj resistiría airoso la colosal presión durante una inmersión de siete horas, tres de ellas en el fondo de los abismos para grabar y recoger muestras.

James Cameron

2022

Grabado del fondo de la caja
Nuevo Deepsea Challenge

La búsqueda continúa

En homenaje a estas dos inmersiones históricas, el Oyster Perpetual Deepsea Challenge presentado en 2022 luce la inscripción «Mariana Trench», además de las fechas «23‑01‑1960» y «26‑03‑2012» grabadas en el fondo. Se impone como un nuevo hito en la aventura humana y técnica compartida desde hace décadas por ingenieros de Rolex y exploradores de las profundidades. Un vínculo enormemente sólido del que ya se había hecho eco James Cameron durante su discurso de agradecimiento a los equipos de Rolex: «Compartimos los mismos valores, la búsqueda de la perfección, la precisión y la calidad, y, al mismo tiempo, un espíritu pionero y aventurero».